

Entre mis estudios como fonoaudiólogo, lo cual incluye análisis del discurso, estudio de las proposiciones a nivel semántico, estudio de los enunciados a nivel pragmático, estudio de las oraciones a nivel morfosintáctico; mis estudios en lingüística comparada con los diferentes idiomas que me han interesado, y el camino hipercurioso en general que tengo con el lenguaje desde la poesía, es que se me ha dado que tengo muchas herramientas para reconocer y encontrar preguntas, e interpretar también lo que cualquier persona expresa de forma implícita tanto explícitamente.
La calidad con la cual nos enunciamos, y con esto no hablo de mejor ni peor, sino de sus características, habla mucho de cómo nos tratamos, lo que queremos resaltar de nuestra historia, y a la vez lo que nos atrevemos a exponer, y por lo tanto, un vistazo a nuestras vergüenzas y miserias, que todos tenemos en algún rincón.
En la expresión de emociones estigmatizadas encuentro gran poder, potenciándolo a través de ejercicios de escritura que he ido descubriendo en la improvisación intuitiva de mis talleres, así como de la mano de mi saber arquetipal. Esto me apasiona.
Sin embargo, lo hermoso, anodino, sorprendente, utópico, también guarda mucho secreto, idealización, e incluso también vergüenzas y rechazos. Aquí, con mayor o menor insistencia dependiendo del período, la persona, el grupo, y otra serie de factores, me atrevo a profundizar, o tan sólo provocar su aparición.
ESCRITURA COMO TERAPIA



ESCRITURA COMO CUERPO
Antes de entrar a crear en talleres, llevaba escribiendo en libretas desde 2003 cuando yo tenía 13 o 14 años, recuerdo el primer cuaderno fue un regalo de mi querida amiga María de Los Ángeles Pozo, con una fotografía de nosotros yendo al estreno de una película en Santiago de Chile. Todavía tengo el cuaderno, con las pocas hojas que no le he arrancado. Cuando tuve 16, tuve un gran profesor que se llamaba Rodrigo Silva Escobar, de Lenguaje y Comunicación, quien me alentó a la filosofía, al trabajo ensayístico, y a concursar por poesía. No me fue mal, eso lo hicimos junto a mi amigo Felipe Lagos García. Fuimos los más pequeños compitiendo contra los estudiantes de último año.
Crecí temiendo preguntar cualquier cosa, demorándome a veces una clase completa para siquiera atreverme a formular una pregunta, aún muriendo de curiosidad. Una mezcla de inseguridad e ideas explosivas y avidez por aprender.
Cuanto tenía 10 años tuve una profesora increible: Ximena Villaseca, en el Colegio Municipal D-200 Villamacul. Ella me instó a investigar. Mis dos primeras investigaciones, solo, voluntarias, la primera fue sobre el Big Bang y los Agujeros Negros, y la segunda sobre Rocas Ígneas y Metamórficas. Eran temas que me cautivaban, que venían en los atlas que coleccionábamos con mi padre domingo a domingo, ya que sus fascículos llegaban con el periódico.
La práctica de yoga, de danza y el contacto con la naturaleza siempre me han trado ideas o versos que he querido plasmar, tengo montones de libretas y notas en la nube, aparte de los sueños que he despertado, que son muy vívidos y que me han servido mucho para entenderme y guiarme mejor. Mis estudios como Fonoaudiólogo, los cuales incluyen muchísimas clases de lingüística, neurociencias, anatomía y psicolinguistica, me dieron un panorama y herramientas maravillosas para comprender la estructura de mis ideas, mi mente y permitirme improvisar al escribir con una estructura relativamente robusta. Improvisar poesía se convirtió en una pasión. Evitando lugares comunes inicialmente, o clichés, o cursilerias, y en la actualidad abrazando todas las voces y permitiéndome fluir según lo que quiera y el contexto, sin castigar mi espontaneidad, sino valiéndome de ella.
Entendí que el cuerpo es todo: lo más básico desde lo cual existimos, y aquello también que producimos: escritura, arte, discurso. Y por lo tanto, el cuidado del cuerpo es vital, y eso requiere estructura, conocimiento, sensibilidad y escucha comprensiva.
Tuve diversas experiencias con escritores de diferentes círculos de poesía, y he aprendido que el ego y el juicio son detestables a la hora de compartir talentos, que si no me sirve para conectar mejor y propiciar la creatividad, la crítica es escasamente útil en este mundo en el que tanto nos quejamos de lo poco amable que es.

Mi primer libro
Así como has podido ver en mi Bio y en mi historia con la Música, en la escritura no fue diferente: oculté mi nombre por muchos años debido a múltiples eventos y características de mi recorrido que me hicieron cuestionarme profundamente la validez del nombre otorgado al nacer.
Mi primer libro es una novela-poemario, impresa por mí, corcheteada por mí, llamada Claustro Cordillera, con la que tuve la fortuna de poder pedirle a una diseñadora que pusiera tipografías y decorara un poco lo que yo tenía en un documento de Word. Y lo publiqué bajo el nombre de Alvar Lázaro, tomando elementos de la raíz de mi nombre, y honrando a Lázaro Gómez Carriles, acompañante y amigo de Reynaldo Arenas, escritor homosexual y anticastrista en tiempos de dictadura en los '80, sobre cuya vida se realizó una película del años 2000, llamada Antes que Anochezca (Before Night Falls, dirigida por Julian Schnabel) protagonizada por Javier Barden y con apariciones increíbles de Johnny Depp, basada en su libro homónimo, el más famoso, publicado en 1993. Lázaro acompañó hasta su muerte a Reynaldo, cuando en Estados Unidos muere por SIDA.
Claustro Cordillera fue producto de 3 años de taller con Diego Ramírez Gajardo, escritor chileno, fundador y director de la Editorial Moda y Pueblo, y que realizaba sus talleres literarios en un lugar icónico llamado la "Carnicería Punk", un lugar lleno de magia, dedicación, y mariconeo.
Allí, tuve 3 años de noches en semana con 5 a 6 horas de encuentros de escritura, inspirado por sus referentes literarios, con personas que como yo, encontraban en la escritura una seguridad y una oscuridad que cobijaba, y que de la mano de Diego podíamos derramar de formas inéditas para nosotros. Criticábamos nuestros textos y dedicábamos muchísima atención a nuestros procesos creativos. Era una cofradía hermosa.
Este libro cada vez me resulta más peculiar. Porque fue publicado en 2014, es decir 4 años antes de que yo conociera siquiera el concepto de no binarismo de género, y pensara en asumirme como tal.
La portada fue producto de un sueño que tuve, que el artista y amigo Rod Huch Echeverría me colaboró a plasmar hermosamente.
El libro narra con una parodia de lenguaje colonial/quijotesco, el encierro que el cuerpo en sus múltiples niveles representa en un país como Chile, que es Virgo, signo del cuerpo, rodeado por una cordillera. Siendo una de las cosas que se le asocia a este signo zodiacal, la columna vertebral.

ASTROPOYESIS
Un proyecto ambicioso y "hecho con las uñas", es decir con todo el esfuerzo y la falta de recursos, desde cero, sin ser diseñadores, ni contar con herramientas de programa en diseño. De hecho, El primer número que editamos fue realizado íntegramente en la plataforma de Slides de Google Docs. O sea, es lo que comúnmente llamamos PPT o Power Point. Y fue así porque yo vivía en Medellín para ese tiempo pandémico, y Pao en el campo de la 7ma región de Chile.
El ambiente psíquico fue tan caótico en este tiempo, que eso se puede ver en la ceremonia online que hicimos de lanzamiento para la revista. Contamos con la espectacular participación de Gonzalo Pérez Benavides, astrólogo y psicólogo de tradición esotérica en Chile, a quien conocí a través de Pao, y que admiro un montón. Lanzamos la revista en pleno eclipse.
Esta revista fue pionera en reunir astrología y escritura creativa con enfoque terapéutico, que era algo que me inspiré a hacer poco antes de invitar a Pao Arriagada a colaborar y ser parte de este proceso.
La letra se ve pequeña, pero, si haces aumento con los dedos o en tu computadora, verás que se puede leer sin problemas. Está en formato grande.
Atención que también puedes descargarla y verla a tu manera, si quieres comentar o conversar, invítame en el formulario de al fondo.
Ah! con Pao hicimos varios videos, aquí te dejo la playlist de un podcast que realizamos, que está en Spotify también, de conversación sobre cultura, astrología, epistemias e intimidad.



Actualidad: Viajemos con Los Arquetipos
Éste es un trabajo que realizado posterior a al lanzamiento de Astropoyesis, en el cual es fortaleció mi técnica, ampliado mis recursos de gatillantes creativos, y perfeccionado mi capacidad para improvisar con los oráculos y despertar ejercicios creativos acordes al contexto y a las personas que se encuentran conmigo, también he podido realizarlo de manera presencial en la Biblioteca Municipal de la ciudad de Villarrica en la Araucania Chile durante 2025, propiciando así procesos de transformación cambio y Asunción de procesos emocionales profundos de la mano de los arquetipos para personas de toda la generaciones, lo cual ha sido profundamente enriquecedor, y validador también para mi proceso de trabajo terapéutico y creativo de forma integrada.















