Cómo funciona...

Puedo atenderte en un encuentro único, o más en un proceso similar al coaching, en encuentros privados, uno a uno, paso a paso, desenredando y tejiendo tu realidad, contigo, en varias sesiones.

El encuentro único de 30 minutos tiene un valor de $15.000 en moneda chilena, exploro una pregunta concreta tuya sobre un ámbito particular de tu vida.

Tengo Paypal, Bancolombia y Bancoestado como métodos de pago.

El encuentro de 90 minutos tiene un valor de $45.000 en moneda chilena. Aquí realizo una lectura de tu estado actual, empleando todas las cartas que sean necesarias, tomando tu carta astral y tránsitos astrológicos como vectores, aplicados a tus inquietudes previamente conversadas.

El encuentro como proceso tiene otro valor, mensual, según si es 1 o 2 encuentros por semana, donde cada sesión tiene un valor menor a la opción previamente descrita, sin embargo, aquí nuestro compromiso es de 2 meses como mínimo. Realizo seguimiento, y estaremos codo a codo descubriendo tu sombra, tus devenires, tus inquietudes, acompañándote a descifrar y abrazar tus miedos. Pondré todas mis herramientas a disposición de tu proceso. Para esta opción, postúlate conmigo y consulta por trabajo 1 a 1. Te enviaré un formulario para esto, si es la opción que buscas.

Puedes agendar conmigo escribiéndome al formulario de abajo.

Yo mismo lo responderé.

Asegúrate de revisar tu correo no deseado por si acaso no te llegue pronta respuesta, puede que esté alojado allí mi mensaje.

Te entregaré un enlace de conexión siempre y en caso de ser online. Nunca te pediré dinero si no hemos acordado cita previamente.

Si la cita es presencial, te envío de igual forma un evento digital que sirva de alerta. El GPS del lugar te lo entrego el mismo día de la sesión.

Tu compromiso...

Asistir puntualmente.

Anunciar atrasos con 15 minutos de antelación como mínimo.

Anunciar ausencia con 24 horas de antelación como mínimo. De lo contrario no puedo ofrecerte devolución de dinero. Sí puedo ofrecerte reagendar, en la medida que mi tiempo lo permita.

Mencionarme los temas que NO quieres trabajar, si aplicara. Es importante que me hagas saber tus límites, yo siempre seré cauteloso, pero son cosas independientes.

El pago de cada encuentro se realiza al momento en que te entrego el enlace de conexión o evento digital según corresponda.

Un antiguo inicio...

Marion, maestra de Reiki y Tarot, a quien conocí en el año 2009, me dijo "Tú serías buen tarotista, tienes tu femenino y masculino en equilibrio". Se metió por un pasillo, y volvió con su mazo de Tarot. Me estaba regalando su baraja. Yo no podía creerlo.

Con el tiempo me atreví a tirarle las cartas a personas cercanas, pocas, principalmente lo hacía para guiarme yo.

El hecho de que en el Tarot existiera Kabbalah, Astrología, Numerología y Arcanos con símbología arquetípica, me generaba un respeto enorme, que se tradujo en temor. Solté el Tarot por años, aunque seguí leyendo esporádicamente de libros que encontré, además de ir profundizando enormemente en astrología, mitología universal y psicología.

Mis guías...

En pandemia volví a contactarme con las cartas, encontré otras barajas, otras ediciones, con las que me permití re-guiarme. Tomé cursos con el equipo de Tarot Poético de Argentina, en el cual pude afianzar mi conexión intuitiva con las cartas.

Finalmente, de la mano de Verónica Herreros, chilena, logré encontrar la claridad necesaria para abordar y trabajar con el Tarot desde un lugar terapéutico, profundo y a la vez, claro, directo.

Mi enfoque...

Mi trabajo con el Tarot es de levantar, esclarecer, dilucidar aquellos mecanismos que te impiden ser tú misma, mismo, misme. Realizo sin embargo, varias tiradas, enfocadas al amor, o a tu estado general, con miras al futuro próximo, el pasado y tu entorno .

En tiempos de tanta incertidumbre, todes estamos buscando una receta: "ándate por aquí" o "evita esto", dedícate a tal cosa. Y no comulgo con ello. Me parece peligroso, porque se presta para dogmatismos, tergiversaciones y debilita el desarrollo de libre albedrío.

Yo te cuento el estado y las tendencias. Las decisiones y el valor de esas decisiones los otorgas tú. Creo que nadie más debe hacerlo por ti. No es ese el valor de mi consulta. No trabajo entonces ni con amarres ni nada que altere el libre albedrío de nadie. Nunca.